COBIJA/PERLA DEL ACRE

La representante departamental de Control Social de Salud, Rocío Lazcano, reveló que en el municipio pandino de Ingavi, una niña de apenas 11 años se convirtió en mamá, tras dar a luz a un bebé. Presuntamente los padres de la menor conciliaron con el agresor.

     “Muy lamentable lo que está pasando en el área rural, es la triste realidad, niñas convertidas en mamás. El lunes tuve una reunión con el responsable de la parte social del municipio de Ingavi, quien menciona que un mes atrás (enero) una niña de 11 años se ha convertido en mamá. Según mi compañero, él después de conocer este hecho intentó acudir a las vías que corresponden, pero los padres de la niña habían conciliado con el agresor”, mencionó Lazcano.

     El departamento de Pando presenta elevado índice de adolescentes en estado de gestación. Los embarazos en niñas y adolescentes se dan mayormente bajo situaciones de violencia, muchos casos están calificados de alto riesgo, por falta de control médico y varios casos se descubren en la etapa final del embarazo y no pueden acceder a los controles médicos.

     “Es una niña que carga a un bebé, esto afectará en el desarrollo de la madre y el bebé. Tenemos elevados índices de pobreza, eso no debería ocurrir, lamentablemente este tipo de casos está sucediendo en otros municipios, donde los propios padres de familia concilian con los agresores o violadores, porque eso es lo que son”, enfatizó.

     El embarazo en la adolescencia es calificado como problema de salud pública, una violación a los derechos humanos de niñas y adolescentes, afecta al derecho a la vida, su integridad física, sexual y psicológica, al verse sometidas, en la mayoría de los casos, a relaciones sexuales forzadas, a continuar un embarazo no deseado ni planificado y a una maternidad forzada. Las posibilidades de muerte materna en menores de 19 años es tres veces más alta que en personas adultas.

     Lazcano exhorta a las instituciones encargadas por ley, a defender los derechos de niñas, niños y adolescentes, aplicar las máximas sanciones.

     “En el área rural, en muchos casos lo ven de una manera natural, los papas concilian y eso no debe ocurrir, ahí debe actuar de oficio la Fiscalía, el Slim, la Defensoría de la Niñez, y la parte médica al primer contacto con la niña debió denunciar este hecho, es un  delito, pero no lo hicieron. Los padres deberían ir presos por conciliar esta violación, también el agresor, marido o novio tiene que ir a la cárcel. Vamos a solicitar un informe detallado de todo lo ocurrido