Los involucrados usaron guantes de látex para no dejar huellas

COBIJA/PERLA DEL ACRE

El Ministerio Público realiza investigación estratégica para esclarecer el asesinato de una mujer de 83 años en Cobija, que el pasado 1 de agosto fue encontrada en el interior de su vivienda, maniatada con cinta las manos, pies, rostro y cabeza. Varios indicios apuntan que el crimen fue planificado por alguien que conocía a la víctima.

     La hipótesis inicial que dos delincuentes ingresaron al inmueble, asesinaron a la anciana, para robarle objetos de valor que vendía en su tienda, se está debilitando. Existen elementos contundentes que revelan la planificación del crimen, los involucrados usaron guantes de látex para no dejar huellas, también se llevaron la memoria de las cámaras de seguridad.

     Doña Bernarda Guevara Anzaldo, de ocupación comerciante, oriunda de Cochabamba, vivía hace más de 30 años en un céntrico barrio de la capital pandina, en compañía de ocho cachorros, a quienes le daba todo su cariño, considerando que no tenía familiares en Cobija. El inmueble de su propiedad es bastante amplio, probablemente tres o cuatro lotes, ubicada en la avenida 9 de Febrero, en inmediaciones de la unidad educativa Baker, a media cuadra del Mercado Central.

     La noche del domingo 31 de julio, algunos vecinos notaron la presencia de sujetos extraños en cercanías del inmueble de la mujer. Una adolescente alertó a la policía de un presunto robo en la tienda, pero los efectivos no le dieron mucha importancia, se retiraron llevándose dos bolsones -con ropa y otros objetos- que estaban abandonadas en la calle.

     Vecinos pidieron a los policías ingresar al inmueble para verificar la situación de la anciana, sin embargo, la respuesta fue que no tenían una orden de allanamiento y ante la falta de ese requisito no era posible ingresar. Al día siguiente, 1 de agosto, doña Bernarda no abrió su tienda, aspecto que preocupó más a moradores del lugar, considerando que cuando realizaba algún viaje acostumbraba dejar recado a sus colindantes.

     Tras la sospecha que algo extraño sucedía, los vecinos insisten con llamadas telefónicas a la policía hasta lograr que ingresen a la vivienda. En el interior descubren un horrendo crimen, la mujer estaba sin vida, atada de manos y pies, de la misma forma envuelta el rostro y la cabeza.

Investigación

     En contacto con Perla del Acre, el Fiscal  de la Unidad de Delitos Contra la Vida, José Luis Quispe, confirmó que las investigaciones están encaminadas de forma estratégica y con cautela, con el objetivo de recabar la mayor cantidad de elementos que permitan identificar a los responsables del crimen que conmocionó a la población pandina.

     “Planificaron la muerte de la mujer de 83 años, tenemos varios sospechosos. Hemos recabado varios elementos que demuestran que este asesinato ha sido planificado cuidadosamente, participaron varias personas, conocían perfectamente los movimientos de la víctima. Los involucrados han utilizado guantes de látex para no dejar huellas en la escena del crimen, también han eliminado las imágenes de las cámaras de seguridad. De acuerdo al certificado de defunción, falleció por sofocación, al envolverle el rostro con la cinta de plástico le obstruyeron las vías respiratorias”, explicó.

     El Ministerio Público, en coordinación con efectivos de la Policía, lleva adelante cerca de tres meses de investigación. Manejan varias hipótesis, la principal es económico, también es probable motivo de deuda a la mujer comerciante, alguna rencilla o disputa entre vendedores, no se descarta una causa sentimental, o el interés de apropiarse de sus bienes.

     “Estamos llevando adelante varias actuaciones con el objetivo de llegar a la verdad histórica de los hechos, no vamos a señalar qué acciones estamos tomando, el Ministerio Público lo que hace es una investigación objetiva con el fin de desvelar la identidad de las personas que han planeado acabar con la vida de esta persona. Hemos solicitado informes a distintas instituciones y los resultados revelarán datos muy importantes”, señaló el fiscal asignado al caso.

     Tras la recopilación de elementos está claro que existen varios sospechosos, cuya identidad se mantiene en reserva con fines de investigación. La mujer de 83 años tenía varios clientes, mantenía estrecha amistad con tres personas en Cobija, también enfrentaba procesos judiciales en determinado caso que se mantiene en reserva.

     “En exteriores, el inmueble tenia cámaras de seguridad, curiosamente no existen las imágenes de ese día, otro aspecto que refuerza nuestra hipótesis que ha sido planificado el crimen, es que la mujer tenía ocho perros dentro de su casa, situación que hace suponer ante el presunto ingreso de sujetos extraños al interior de la vivienda los cachorros se hubiesen alborotado con ladridos, pero esa noche los vecinos no escucharon ninguna bulla. Lamentablemente la persona de la tercera edad vivía sola, no tiene familiares en Cobija, y ante el ataque de los delincuentes, no pudo defenderse”, señaló Quispe.

     Después de la muerte de doña Bernarda, una de dos hermanas que vive en Cochabamba llegó a Cobija para realizar trámites de traslado del cuerpo sin vida, actualmente estaría a cargo del inmueble donde sucedió el crimen. Asimismo se conoce que una hermana habría realizado los trámites correspondientes para declararse heredera. En cuanto al destino de los cachorros fueron rescatados por la Asociación Protectora de Animales Pando para darles la atención que concierne y posterior adopción.