Noticias de Pando

Familias indígenas requieren alimentos para sobrevivir en la cuarentena

COBIJA/ANF-PERLA DEL ACRE

En medio de las medidas asumidas en Bolivia por la pandemia del coronavirus, hay sectores más vulnerables como el de mujeres indígenas del sector amazónico, que entre otros riesgos, se ven sumidas en la carencia de alimentos para subsistir durante esta etapa de emergencia. Aseguran que lo que requieren con urgencia son verduras.

     “A diferencia de otras regiones, el Norte Amazónico tiene un porcentaje elevado de mujeres que tienen a su cargo el trabajo del cuidado de la familia, diferente de los varones. Esto se encuentra relacionado a la actividad económica de las familias de esta región, donde la mayoría se dedica a la producción agroforestal, y en ello el rol de la mujer es principalmente de cuidadora del hogar”, detalla la técnico e investigadora del Centro de Investigación y Promoción del Campesinado (CIPCA), Iris Arianne Martínez.

     El pasado 25 de marzo, la presidenta de Bolivia, Jeanine Áñez, decretó estado de emergencia sanitaria en todo el país hasta este 15 de abril con medidas más radicales, tras un notorio incumplimiento de la cuarentena ordenada para contener la propagación del Covid-19.

     Entre varias de estas medidas están las restricciones a la circulación de la ciudadanía y el control para el abastecimiento de alimentos con la numeración final del carnet de identidad una vez a la semana y la prohibición de la circulación de vehículos públicos y privados, salvo aquellos de alimentos, seguridad y salud.

     Esto ha puesto en complicaciones a territorios indígenas que a diferencia de las áreas urbanas tienen mayores obstáculos en accesos a alimentos y medios de comunicación.

     “Ya no hay verdura, entonces estoy variando con lo que es castaña molida, para que podamos tener un poco de alimentación más vitaminada. Como se dice, la mujer es una arquitecta en el tema de la alimentación, así que tengo que dar variedad. Así la estamos pasando, pero ya estamos al límite de los que teníamos”, afirma Doris Domínguez Ecuari, presidente de la Coordinadora de Integración de Organizaciones Económicas Campesinas (CIOEC) de Pando.

     Esta realidad se repite en muchos de los hogares de la región amazónica, que antes de esta pandemia ya registraban crisis en relación a sus ingresos económicos por la deforestación, la baja productividad de los productos del sector y el cambio climático. Las mujeres son las más afectadas.

     “Las mujeres son las que cargan con el rol de alimentar a la familia, y hace cada vez más difícil acceder a la compra de verduras y otros productos, además lo que tenían de reserva se va terminando. Los hogares de la amazonia, mayormente, están compuestos por una familia extensa, abuelos, nueras, hijos, nietos, tíos, tías, etc. que viven en un mismo espacio y las condiciones de las casas son precarias. Entonces la alimentación generalmente es compartida y se termina más rápido”, explica Martínez.

     Es así que en este contexto, la importancia de la alimentación frente al Covid-19, establece CIPCA, toma preminencia por la necesidad de una dieta nutritiva para fortalecer el sistema inmunológico y así prevenir el contagio o la mortalidad por virus y otras enfermedades.

     “La gente se abastece de sus chacos (terreno de cultivos), tenemos yuca, plátano, arroz y nuestros animales, gallina, pescado, jochi, pero las verduras es lo que no hay”, destaca Tatiana Galarza, dirigente campesina del municipio El Sena.

     En estas regiones acceder a ese tipo de alimentación amerita realizar gastos mayores, mientras que económicamente la familia campesina se encuentra en un estado crítico, como explica Edimilson Ramírez Navarro, joven campesino del municipio de Puerto Rico.

     “Sobrevivimos con lo poco que nos dejó este tiempo de zafra. Es preocupante porque no tenemos para comer a diario, para la canasta familiar, económicamente los más afectados somos el sector más bajo. Con decirle que hace dos días atrás, aquí el vecino de al lado no tenía ni para comer, ni comprar un kilo de carne, nosotros estábamos al borde de pasar eso, y tuvimos que prestarnos un dinero y pasar con eso unos días. Vamos a sufrir las consecuencias muy drásticamente”, mencionó.

     Frente a estos escenarios, desde CIPCA también se advierte que la situación para las mujeres después de esta cuarentena será aún más difícil. “Las mujeres no dudarán en luchar por hacer llegar alimento a sus hogares para que sus hijos e hijas no sufran por la escasez de alimentos. A lo largo de la historia las mujeres han demostrado ser luchadoras”, recalca.

Comparte

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *